La Semana Santa de Córdoba: entre el espectáculo y la tradición

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La Semana Santa de Córdoba es una de las celebraciones más emblemáticas de nuestra ciudad. Año tras año atrae a miles de visitantes que se quedan maravillados con su espectacularidad. No soy una persona creyente, pero aun así, no puedo negar la belleza y el encanto que envuelve a esta festividad.

La espectacularidad de la Semana Santa

En mi opinión, la Semana Santa de Córdoba se ha convertido en una fiesta popular que cuenta con un espectáculo inigualable. Cada escenarios en los que se desarrollan las procesiones es digno de admirar, y la ciudad se transforma en un marco incomparable para la ocasión. Me emociona ver cómo los pasos son mecidos al ritmo de las bandas musicales. Cómo avanzan por las estrechas calles, rodeados de una multitud que se agolpa para contemplar las imágenes que representan.

Sin duda es una obra de teatro con la ciudad como escenario.

Cambios en la carrera oficial

Sin embargo, debo señalar que en los últimos tiempos la Semana Santa de Córdoba ha experimentado algunos cambios que no me parecen positivos. La nueva ubicación de la carrera oficial, junto a la Mezquita-Catedral, ha limitado el acceso a la misma. Se ha convertido en una celebración exclusiva para aquellos que pueden pagar para presenciarla. Además, el uso de unas pantallas gigantes para que no se puedan ver los pasos desde fuera, ha generado polémica. Desde la Ribera cordobesa se ha deslucido, en cierta medida, el esplendor de la celebración.

A pesar de todo, creo que la Semana Santa de Córdoba sigue siendo un evento que merece la pena vivir, ya que representa una tradición cultural muy arraigada en nuestra ciudad. Me preocupa, eso sí, que la fiesta se esté convirtiendo en un mero escaparate de postureo para muchos católicos (y no católicos). Aunque debemos respetar todas las creencias, es importante que no se pierda de vista el verdadero significado de esta celebración, pero también es incuestionable que se ha convertido en un mero objeto de consumo visual, que hay que aprovechar.

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