La exposición de José Manuel Ayllón en la Sala Arpillera es de esas muestras que uno no espera… y que acaban dejándote pensando durante todo el camino de vuelta a casa. Entré creyendo que veía una serie de fotografías, pero bastó acercarme para descubrir que aquello no era pintura, ni lápiz, ni impresión: eran hilos. Hilos de colores que, cuando te aproximas, revelan un trabajo paciente y casi meditativo, y que desde lejos se funden creando imágenes que engañan a la retina.
Un cordobés de San Basilio que hilvana arte y resistencia
Ayllón —cordobés del barrio de San Basilio— lleva años perfeccionando esta técnica que él mismo describe como “pintar con aguja”. Cada cuadro se construye a partir de un mapa de puntos, códigos de color y cientos de tonalidades que utiliza como si fueran pigmentos. No es raro encontrar obras con más de 60 tonos distintos en un mismo bordado, lo que explica por qué, a dos metros, parecen fotografías.
La exposición reúne una treintena de piezas: iconografía religiosa cordobesa y sevillana, retratos, obras inspiradas en el cine, paisajes… un recorrido que mezcla devoción, cultura popular y homenaje a la tradición artística local. Piezas como Mi Soledad o la reinterpretación de La Chiquita Piconera de Julio Romero de Torres demuestran hasta dónde puede llegar esta técnica cuando se combina con paciencia, sensibilidad y oficio.
Pero más allá de la técnica, lo que hace especial a esta exposición es su historia. Al conversar con el propio artista —que está presente cada día atendiendo a los visitantes— uno descubre que este proceso creativo fue su refugio durante la lucha contra el cáncer. Puntada a puntada, el arte se convirtió para él en una forma de resistir, de mantenerse en pie y de transformar un tiempo de incertidumbre en un acto de creación.
Creatividad, alma y oficio en la Sala Arpillera
No lo dicen los carteles ni los textos oficiales, pero lo notas al hablar con él: detrás de cada obra hay más que una imagen. Hay vida, memoria y una enorme disciplina emocional. Quizá por eso esta muestra no solo sorprende, sino que conmueve.
Si pasáis por la Sala Arpillera estos días, dedicad unos minutos a mirar primero desde lejos… y luego muy, muy de cerca. Veréis cómo el hilo deja de ser hilo y se convierte en algo que parece imposible: una ventana a la historia personal de su autor.
Información práctica
- Título de la exposición: El arte en sus manos. La magia de la aguja y el hilo
- Autor: José Manuel Ayllón (Córdoba, 1976), artista del barrio de San Basilio
- Lugar: Sala Arpillera, Palacio de la Merced (Diputación de Córdoba), Plaza de Colón, 15
- Fechas: del 6 al 23 de noviembre de 2025
- Horario: de lunes a viernes, de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 h